A nivel mundial, nuestro conocimiento sobre la pesca en los lagos sigue siendo limitado a pesar de su importancia para la seguridad alimentaria y los medios de vida. Aquí mostramos que las capturas de peces pueden responder positiva o negativamente a los cambios climáticos y de uso de la tierra, analizando datos de series temporales (1970-2014) para 31 lagos en los cinco continentes. Descubrimos que los efectos de un controlador climático o de uso de la tierra (Ejem. la temperatura del aire) en el entorno del lago podrían ser relativamente consistentes en las direcciones, pero los cambios consecuentes en un factor ambiental del lago (Eje. la temperatura del agua) podrían provocar aumentos o disminuciones en la captura de peces en un lago determinado. Un análisis de correlación posterior indica que es menos probable que se produzcan reducciones en la captura de peces en respuesta a posibles cambios climáticos y de uso de la tierra si un lago se encuentra en una región con mayor acceso a agua limpia.